domingo, 22 de noviembre de 2009

CHARLIE PARKER ON VERVE (V): AUGUST 1951

De nuevo una de las sesiones del genio de Kansas para la casa de Norman Granz. En este caso la celebrada el 8 de agosto de 1951. Acompañan a Bird, uno de sus seguidores más acérrimos en el camino de la heroína Red Rodney, trompetista que prácticamente ha pasado su vida de cárcel en cárcel (a pesar de su cara de niño bueno) y una lujosa rítmica formada por John Lewis -p-, Ray Brown -b- y el gran Kenny Clarke -d-.
No es ésta una de sus mejores sesiones, pero es destacable la nueva grabación de Lover Man, tras la caótica grabación de 1946. Cinco temas que ilustran la genialidad del más grande de los músicos de Jazz de todos los tiempos.

Disco recomendado: Bird: The complete Charlie Parker on Verve (Verve, 1988)

4 comentarios:

  1. Quizás el 51 sea el último año grande de Bird. Desde ahí la caída fue mayúscula y en los tres últimos años hacía lo que podía que en su caso ya era mucho.
    ¿Es Charlie Parker el mejor músico de jazz de la historia? Sin duda con intérprete pocos se le pueden comparar, Armstrong o Art Tatum quizás, pero como figura del jazz -es decir teniendo en cuenta composición, arreglos, proyección etc..- pondría otros nombres a su altura o por encima.
    Saludos

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  2. Me he pensado darle el título de más grande, finalmente me he decidido porque creo que es el músico más imitado, evidentemente hay mejores compositores, mejores arreglistas... pero creo que Bird es el mejor representante de esa generación que marca un antes y un después en la historia del jazz.
    Gracias por tu comentario, me gustan las discusiones.

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  3. Estoy de acuerdo con el Doctor. Parker fue un grande, un gigante, fue un genio…pero inconsciente de su genialidad desde el punto de vista de lo que estaba creando con cada improvisación. Me recuerda a la descripción que hace Cortázar en El Perseguidor cuando dice: …”Decidí no tocar la segunda edición del libro, seguir presentando a Johnny como lo que era en el fondo: un pobre diablo de inteligencia apenas mediocre, dotado como tanto músico, tanto ajedrecista y tanto poeta del don de crear cosas estupendas sin tener la menor conciencia (a lo sumo un orgullo de boxeador que se sabe fuerte) de las dimensiones de su obra”.

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  4. Creo que debe haber muy pocas personas que sepan algo de jazz, que no estén de acuerdo en considerar a Parker un genio. La genialidad en una persona está en el filo entre la cordura y la locura. Parker con su vida fue un loco y con su música un genio con mucha cordura, el concientemente decidió cambiar el rumbo y la historia del jazz, y lo logró ampliamente. Como dice Dizzy, con Parker hay una antes y un después en la música de jazz. Concuerdo también con Krapp, creo que es solo comparable con Armstrong en genialidad musical.
    Saludos,

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